Argentina no es sólo tango y rock
Cuando pensamos en Argentina lo primero que se nos viene a la mente es el tango. En el mundo Argentina es sinónimo de tango; y es que incluso al poner el primer pie en el aeropuerto de Ezeiza te reciben al son de esa melodía.
Imaginas que todos saben moverse al compás del piano, la guitarra y el bandoneón (especie de acordeón) con esos movimientos sensuales y arrabaleros del tango. Tal como acá se imaginan que los caribeños vamos bailando salsa por las calles, nosotros creemos que aquí van bailando tango, pero la realidad es muy distinta. La mayoría de los argentinos que vas conociendo no tienen ni la menor idea de cómo hacerlo.
Este ritmo se ha renegado de cierta manera a los más viejos, a la generación de los abuelos (y ojo, no los de las clases más pudientes) así como a los turistas y residentes extranjeros. La verdad es que los jóvenes no escuchan tango. Entonces ¿Qué se escucha?
Bueno, otro cliché es que los argentinos sólo hacen rock en español. Si lo pensamos bien afuera básicamente conocemos sólo bandas como Soda Stereo o Bersuit Vergarabat. Ciertamente sí se escucha mucho rock en español, tal vez demasiado y además existen un sin fín de bandas más o menos famosas. Pero hay además otra realidad que aquí descubrí.
Seguro que nunca escucharon si quiera hablar de la cumbia o el cuarteto argentino. Dirán la cumbia es la de Colombia y el cuarteto, pues ni puta idea. Sin embargo existen estos dos géneros que juntos forman “la movida tropical argentina”.
El primero se trata de un híbrido musical, que no es ni chicha ni limonada, que nada tiene que ver con la colombiana que hasta sabrosa suena. En la “cumbia” los cantantes y bandas se encargan de versionar y transformar cualquier canción, no importa el género musical al que pertenezcan originalmente, o por lo menos lo hacen las bandas más modernas.
Por otro lado tenemos el “cuarteto”, con un cierto parecido al merengue (según mi oído) hasta en su manera de bailarse. Aunque si pretendes que un argentino baile un merenguito se volverá más torpe que Bambi.
Pero eso sí, a pesar de que los argentinos, o digamos los porteños (para no meter a todos en el mismo saco) se creen los europeos de América y pretendan que estos ritmos no están entre sus gustos, con 4 tragos encima todos corean las canciones como su fuera un concierto del mismo Cerati.
